Detenido acusado de tráfico de hachís en un control en la A-7
- El detenido fue trasladado junto con la droga y el vehículo intervenido hasta el acuartelamiento de la Guardia Civil de Albuñol para instruir diligencias
La Guardia Civil se ha incautado de 101 gramos de resina de hachís en un vehículo que fue interceptado en un control de carretera en la A-7, en la costa de Granada, en que ha detenido a un joven de 26 años, sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.
Según ha informado la Guardia Civil en una nota, la intervención tuvo lugar a la altura del kilómetro 372 de la A-7, en el término municipal de Albuñol. Una patrulla de esta última localidad estaba realizando un control de personas y vehículos en aplicación de las medidas preventivas de control de la movilidad a consecuencia de la pandemia, e interceptó un vehículo que viajaba dirección Sorvilán.
Los agentes identificaron al único ocupante del vehículo y al comprobar que estaba especialmente nervioso al solicitarle su documentación, los agentes registraron el vehículo y encontraron en el maletero una bolsa con 101 gramos de resina de hachís.
El detenido fue trasladado junto con la droga y el vehículo intervenido hasta el acuartelamiento de la Guardia Civil de Albuñol para instruir diligencias. Al día siguiente fue puesto a disposición del juzgado de guardia de Motril.
Esta actuación responde al esfuerzo que la Cuarta Zona de la Guardia Civil está desarrollando en el Campo de Gibraltar y su zona de influencia para combatir el narcotráfico procedente del norte de África.
Robo de maquinaria en Loja
En otro operativo, Guardia Civil ha investigado a dos individuos de 30 y 25 años, con antecedentes policiales, como presuntos autores del hurto de varias piezas de recambio de la maquinaria de una almazara de Loja el pasado 2 de febrero.
Un responsable de la almazara denunció en el cuartel de Loja que los investigados accedieron con un turismo hasta el patio exterior de la almazara y en un descuido supuestamente «se apoderaron de un masero de molino y de una bancada de bomba, piezas valoradas en 1.600 euros, que allí guardaban.
Las cámaras de seguridad de la almazara grabaron el hurto y los agentes del equipo Roca de la Guardia Civil de Loja no pudieron ver bien a los ladrones, pero sí el coche en el que cargaron las piezas sustraídas. Con esa pista, estos guardias civiles han conseguido identificar a los dos sospechosos e investigarlos una vez que fueron localizados el primero en Cijuela y el segundo en Fuente Vaqueros.
