Los bebés de Granada «fuman»

El asunto es lo suficientemente grave para tomárselo en serio. En Granada y su área metropolitana cuando un bebé sale a la calle, está respirando veneno. El equivalente tóxico a fumarse entre uno y cuatro cigarrillos, cada día, todos los días. ¿Nos preocupa?

Sabemos los efectos nocivos del tabaco, pero parece que los efectos de la contaminación en nuestra salud son otra cosa y no es así. Recientemente los medios de comunicación se hacían eco del estudio publicado por una de las principales revistas científicas de cardiología, la European Hearth journal de la Universidad de Oxford, que afirma la contaminación en lo sucesivo va a matar en Europa por cáncer a más gente que el tabaco. Este dato ¿nos preocupa algo más?

Ahora que estamos cerca de las elecciones locales, no está de más conocer que la contaminación va a intoxicar a cada persona con independencia de a qué partido vote y enfermará de forma democrática a todo el mundo por igual, sin importarle sexo, raza o religión. ¿Preocupará eso la corporación resultante de las elecciones locales? ¿Lo suficiente como para adoptar políticas efectivas y, sobre todo, valientes?

El problema local de la contaminación va más allá de nuestra salud, que no es poco, sino que tiene una dimensión global al empeorar la emergencia climática de nuestro planeta. Es urgente actuar ¿somos capaces de despertar como sociedad? ¿lo somos? No cabe duda de que el reto merece la pena, estamos hablando de nuestra supervivencia.

No obstante, en ocasiones da la sensación de que la sociedad ha normalizado las imágenes de un oso polar sobre un iceberg que se derrite o anuncios alertando sobre la extinción de las abejas, sin que ello nos impulse a actuar. ¿Actuaríamos si estuviera ardiendo la sartén en nuestra cocina? confío en que sí, porque en caso contrario acabaríamos ardiendo junto a ella.

Ese es el mensaje de una buena parte de la juventud, también la granadina. Está a reaccionando ante lo que se nos está viniendo encima, porque “nuestra casa está en llamas”. Por esa razón para mañana viernes 24 de mayo los jóvenes organizados bajo el movimiento #FRIDAYSFORFUTURE, #JUVENTUDPORELCLIMA, han convocado una huelga global en cientos de ciudades. En Granada está prevista para las 12:00 h. en los Jardines del Triunfo y persigue la declaración de emergencia climática por parte de las administraciones en nuestra provincia.

El alumnado que se sume a la huelga ese día al menos, no pasará calor en las aulas. Lo tendrá fuera. No es un problema sólo de la juventud por eso es necesario que se oiga la voz de todas las familias.

Jóvenes por el futuro es una de las organizaciones que ha irrumpido con fuerza en los últimos meses y forma parte de la Mesa por el clima de Granada. Otras, como Extinction Rebellion (XR) suben la apuesta y hablan directamente de extinción, planteando acciones de resistencia civil por la gravedad de la situación. Cincuenta activistas de XR escenificaron en el Mirador de San Nicolás antes de las elecciones generales, la amenaza de extinción a la que se enfrenta la humanidad y el resto de especies si no se toman medidas drásticas y urgentes para frenar el cambio climático.

No es necesario crear alarma social. Es preciso que las familias entren en modo PÁNICO Y ACTÚEN, porque se nos acaba el tiempo. Que salgan a la calle, que exijan a las autoridades que cumplan con sus competencias para reducir entre otras cosas la contaminación y que pensemos cada persona individualmente, qué podemos hacer en nuestros hábitos diarios.

En Granada capital la nueva corporación no lo tiene muy difícil para empezar a trabajar, basta con aplicar el plan de calidad del aire y de movilidad urbana sostenible. Además de dinero, hacen falta narices.

¿Creemos en los Tweets de Donald Trump? ¿o en lo que advierten, científicos, médicos y organizaciones ecologistas?

CATEGORÍAS

COMENTARIOS

Wordpress (0)
Disqus ( )