Entre narices anda el libro

Esta Navidad pasada le han regalado a mi hija el libro de Harry Potter versión deluxe (editorial Salamandra). Pero deluxe, deluxe… vaya, que se mueve el ajedrez, puedes abrir la carta de Hogwarts y casi que hasta puedes subirte en el hipogrifo (de ahí el precio, que los hipogrifos están muy caros) y he pensado: “pues me lo voy a leer”. ¿Por qué no?

Pá empezar es un libro para niños, esa gente con cuarenta años que te dice que su libro favorito es Harry Potter o que ellos leen mucho porque se han leído toda la colección de novelas de J.K Rowling… que se lo miren, porque tiene una letra que la ve un miope desde Cuenca, y eso ya, queridos amigos, quiere decir algo… aparte de que la edad recomendada de lectura son siete años no cuarenta, aunque bueno hay gente con treinta, cuarenta y cincuenta años con menos luces que el Draco Malfoy…

Luego, a mí Harry Potter personalmente me cae mal, que niño tan cargante tól rato con el “soy el elegido” que “soy el elegido”… que sí, que ya nos enteramos en el primer libro, no hace falta que estés siete libros más repitiéndolo en cada página. Que la historia es para niños, no para gente con problemas de comprensión lectora… bueno, quitando a los de la falta de luces de arriba.

Lo que más gracia me hace es que Voldemort solo ataca durante el curso escolar, respetando vacaciones, puentes y fines de semana. Claro que también si eres el mago más poderoso del mundo y te puede un niño de doce años… en fin… menudo mojón de malo: un tío sin nariz, blanco cual mosca mojada en leche y metiéndose con los niños de un colegio de magia y tontería. Leí que no tenía nariz porque su apariencia es reflejo de su maldad interior y de su falta de alma, y yo sigo sin entenderlo ¿en qué quedamos le falta el alma o la nariz? ¿Qué tendrán que ver los churros con las merinas? Esperemos que el otro miembro saliente de su cuerpo si lo haya conservado y no se la haya caído con el alma también… Yo que tengo una nariz como el sillín de una bicicleta deduzco que es porque tengo un alma que no me cabe en el pecho.

¿Y no os parece muy muy parecido el episodio dónde a Harry lo posee la malafollá granaína por el horrocrux que lleva al cuello con Frodo cuando se cuelga el anillo? ¿Eh, eh? Tampoco he entendido mucho por qué en el mundo muggle todos van vestidos como gente del siglo XXI y en el mundo mágico van como si vivieran en la época medieval, sin tele ni nada… Cómo mucho una radio que parece sacada de la Primera Guerra Mundial… pero bueno, que hay tantas cosas que no entiendo que podría estar aquí diecisiete artículos escribiendo sin cesar y aburriros tanto como todos los libros de Harry repitiendo que es el elegido… En fin, que larga vida a J.K Rowling y sus novelas, que al menos consiguen que los niños y no tan niños se atrevan a leer.

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COMENTARIOS

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    Amparo 2 meses

    Voldemort es funcionario, de ahí el escrupuloso respeto a festivos y vacaciones

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    Manuela Moriana Moles 2 meses

    Es un detalle que el malo solo ataque en horario lectivo. Hay ciertos valores que hay que respetar siempre. Jaja.

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