Se llama política/copla
Los tres finalistas copleros del show de la política local granadina están ofreciendo copiosos recitales estos días: Luis Salvador, Sebastián Pérez y Onofre Miralles. Estos tres tenores que, como dice mi amiga Curra Arroyo “toman el chocolate de espaldas”, reciben grandes ovaciones y se han nutrido de un repertorio variadísimo para todos los públicos.
Luis Salvador es como Rocío Jurado, hace alarde de facultades técnicas muy preocupado por su imagen, con más voz que estilo, en continua exhibición mental y personal, retocando en cada espejo su look de alcalde recién estrenado. Sebastián Pérez es una suerte de Isabel Pantoja metido en el programa de “Supervivientes” del PP granadino donde los que no han sido expulsados están nominados por los juzgados y por el público (de ahí los diez mil votos menos). Y Onofre Miralles es “un”Lola Flores descafeinado, que canta para los guiris de la política, para gente que le gustan los aspavientos y la demagogia sonora. A Onofre Miralles le sale incluso la vena torera de “la Faraona”, y le lanza un aviso desde la presidencia al toro/alcalde vía Twitter con un pasodoble hiriente.
Sebastián Pérez es el candidato atribulado que le hace luz de gas a sus adversarios políticos con la sombra del padre de Hamlet, cantándole “La bien pagá” al nuevo alcalde. Luis Salvador es un patrache que navega entre Pérez y Onofre al son de “Quién maneja mi barca, que a la deriva me lleva”, y Onofre se viste de gloria cantándoles a sus dos amigos/enemigos un “María de la O” cargado de guasa: “Te (os) quieres reír, y hasta los ojitos los tienes moraos de tanto sufrir”.
De los tres finalistas del show, el que más problemas tiene es el señor Pérez, y ya no solo con su público, sino con su propio equipo. Le toca convencer a esa familia política tan heterogénea llena de democristianos, opusimos, falangistas (la mitad de estos ya se han ido a VOX), franquistas (ídem), monárquicos, tradicionalistas, liberales, compañeros pro-Torres Hurtado, más lo que se apuntaron a última hora creyéndole caballo ganador, de que él no es el concursante que debe irse del show, y para ello les está improvisando un Ave María con retazos flamencos que es lo que les llega al alma a su congregación.
Estos tres copleros de la política municipal, que se están dando sus baños de multitudes cantando por todos los escenarios del Corpus, mostrándose, exhibiendo sus faralaes, dejándose ver la peineta, son tres grandes artistas que esta semana se enfrentan al jurado y al público. El lugar de la gran final donde se decide su futuro será el salón de plenos del muy noble consistorio de la capital granadina. Con los de Canal Sur me quedo dormido, pero estos tres señores me mantienen despierto y hasta tarareo sus estribillos.
