Antes de que anochezca

El próximo día 19 de junio estamos los andaluces llamados a las urnas, se nos convoca a plebiscito; esto significa que la plebe, o sea nosotros, podemos pronunciarnos para que supuestamente y entre todos, elijamos a los transitorios dueños de nuestros designios. Paradójico. No obstante y aunque no está en mi ánimo tan siquiera influenciar a los indecisos, pues como decía Saramago, convencer al prójimo de que mis ideales son los mejores sería tan solo un intento de colonización del otro, sí que me permito incitaros a todos a ejercer este derecho como si fuera un deber.

Mi hijo mayor va a votar este año por primera vez en su vida, y como si a él me dirigiera, os digo: votad, por favor. Votad a quien queráis, pero votad. Yo lo haré al partido que considere menos malo, pues convendréis conmigo que bueno no hay ninguno, ¿o tal vez sí? Bueno, allá cada cual.

Lo que en realidad quiero decir, por lo que se desprende del manido y común discurso que oímos y pronunciamos, quizá a modo de conclusión y, o, para evitar estériles discusiones que nunca acaban bien, es que todos los candidatos mienten y únicamente están en política para llenarse los bolsillos. Sin embargo, en ocasiones y dejándose llevar por tal o cual noticia que apunta a una corrupción aquí, un desfalco allá o algún mangoneo acullá, se despiertan nuestros tendenciosos corazoncitos y comenzamos a despotricar contra este o aquel prócer, nos dejamos llevar por una excitación momentánea y sin darnos cuenta ponemos sobre la mesa nuestras querencias, que en cuanto son rebatidas, intentamos, o al menos yo así lo aprecio, despejar de un verbal manotazo alegando eso de: no, si yo soy apolítico, lo que pasa es que… Sí, hombre, sí, guardamos en nuestros adentros para ahorrar esfuerzos inútiles, apolítico por mis cojones. Y aquí es donde quería llegar, porque bien está que uno decida libremente a quien votar y a quien no, pero defender lo indefendible… Es que mira lo que han robado estos. Los tuyos robaron más. Pero tu amado líder incumplió cada uno de los puntos de su programa. Es que hay cosas que son imposibles de cumplir y tú lo sabes, y si no mira con quien está pactando el tuyo después de decir por activa y por pasiva que jamás lo haría. Será que los tuyos no pactaron con aquellos en su momento, que llegado el caso se alían con el mismísimo Satanás. Año de rojos año de piojos. Vaya, no hemos tenido bastante con cuarenta años de fascismo y otros cuarenta de lo mismo. Y aquí entramos en bucle, una vez más, y otra y otra y otra, porque esto es así y siempre así será; esta es una conclusión personal, pero inamovible e intransferible. Acaso no se cansaba el pueblo de Roma de la República y pedían a gritos un dictador, hasta que se incomodaban tanto de este que urdían su muerte para retornar de nuevo a lo anterior, y al poco vuelta empezar, otra vez igual. Entonces se daban cuenta de que todo era lo mismo, llegó de pronto el no solicitado imperio y observaban que nada cambiaba; bueno, algo sí: que ya no les preguntaban ni a los tribunos de la plebe, se les daba a estos carguillos y prebendas, y todos tan contentos. ¿Todos? Bueno, no todos, al populacho: panem et circenses. Ah, ahora sí. Tal cual se viene haciendo per saecula saeculorum, porque, y lanzo al aire la pregunta, ¿qué coño ha cambiado en más de 20 siglos? Y eso por no decir el atraso o la paralización a que fuimos sometidos por el oscurantismo que nos impuso la religión durante mil años de Edad Media. Y es que si bien es verdad que ahora viajamos en avión, hablamos por teléfono o nos libramos de una muerte segura gracias a la penicilina, en todo lo demás no aprecio transformación alguna que sea digna de mencionar. Podemos comparar a Berlusconi con Julio César, a Billy Gates con Craso y al estadio Santiago Bernabéu con el anfiteatro Flavio, todo sigue igual. Empero, no pierdo la esperanza, porque si bajo los brazos sé que me aplastarán, y eso nunca. Por lo tanto, y visto lo visto, insisto, os invito e incito a que el domingo 19 de junio vayamos todos a votar. Así que andaluces, dejemos de sestear por un momento y ese día, antes de que anochezca…

CATEGORÍAS

COMENTARIOS

Wordpress (0)
Disqus (0 )